Una empresa chantajea a Woody Allen con resucitar su pasado

No a todos los famosos les gusta la publicidad y aquello de salir en los papeles y, para muestra un botón, o mejor, una camiseta. Esta es la campaña publicitaria que la mayor empresa de camisetas de Estados Unidos, American Apparel, utilizó para promocionar sus productos. Evidentemente la imagen del prestigioso director cinematográfico fue tomada sin su consentimiento.

A fin de paliar este atropello, Allen interpuso una demanda en la que exige a la empresa un total de diez millones de dólares. Y es ahí cuando viene toda a polémica. La empresa cree que la cantidad requerida por el director es excesiva y a fin de librarse de ella piensa recurrir a cualquier método, incluido el chantaje.

Los abogados de Apparel no se amilanan al declarar que: «Nuestra campaña no puede haber dañado su reputación, porque él mismo ya la arruinó en esa época». Ese momento, oscuro, de la vida de Allen corresponde a principios de los noventa cuando, estando todavía casado con la actriz Mía Farrow, comenzó una relación sentimental con su hija adoptiva, Soon Yi Previn, acto que fue denunciado por su, entonces esposa, por acoso sexual.

Pero los empresarios de las camisetas, según han declarado en ‘The Daily Telegraph’, creen que la cantidad demandada es excesiva para una campaña que sólo duró una semana y que fue expuesta en Nueva York y Los Ángeles. Además sentencian que el director está sobreestimando el valor de su imagen y que ellos no pagarían tanto porque anunciara sus productos.

Por su parte, los abogados de Woody Allen sólo han declarado que esta batalla legal se está convirtiendo en «vejatoria, opresiva, hostigadora y poco relevante». El próximo 18 de mayo comienza el juicio, veremos a quién le dan razón.

Vía | El País

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