Tamara Falcó ha tomado una decisión sobre su boda con Iñigo Onieva

El vídeo de Iñigo Onieva en un festival fue la punta del iceberg. Otros documentos confirman su actitud y Tamara ha decidido actuar. Aunque aguantó el tipo el pasado viernes al ir con él a una boda, ayer estuvo en casa de Isabel Preysler llorando todo el día según comentan.

De momento, la fotografía que subió a su perfil de Instagram con el anillo de pedida ha desaparecido. Tras la boda, recogió sus perros y se fue a casa de Isabel. Según un testigo «No sale de la biblioteca, lleva todo el día llorando y no quiere saber nada de Iñigo».

Mientras tanto, Onieva «no para de llamarla pero ella no responde al teléfono, Iñigo está desesperado llamando incluso a las amigas de Tamara para que le pongan en contacto con ella». Nuevos vídeos de Iñigo besando a Marina, la espectacular modelo brasileña, en el festival han sido la puntilla a la relación entre los jóvenes.

Lo que parece estar claro es que Tamara no va a pasar por esto, aunque muchos han sido los rumores al respecto durante sus años de relación con Onieva. Él mientras tanto se excusa indicando que las imágenes son de hace años, pero la escenografía del festival es la de 2022, por lo que su coartada queda inutilizada por su propia actitud.

Ya veremos qué sucede exactamente y cómo afrontan ambos lo que parece ser una ruptura cantada. El escándalo está servido y podría haber exclusiva de por medio. Del compromiso a la ruptura en 48 horas. Todo un récord.

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