Tras protagonizar una carrera musical inclasificable y llevar años alejado del mundo, Enrique del Pozo regresaba ayer a Telecinco. Lo hacía tras haber decidido Diego Arrabal marcharse, de forma definitiva y a la búsqueda de nuevos horizontes, de Viva la Vida. El pensamiento único nunca fue con el mejor paparazzi del país que jamás le siguió el juego a los que dirigían el programa.
Ayer por la noche se sentaba en Enemigos íntimos Enrique del Pozo, en calidad de amigo de Víctor Sandoval y contaba que hubo momentos tan difíciles para el colaborador de Sálvame que pensó en suicidarse. Esto ocurría en los últimos meses cuando el ex presentador de Mamma Mía veía como le era imposible salir de su bache económico y que no tenía el apoyo de su marido Nacho Polo.