Ayer se ofrecía en el Palacio de la Zarzuela una cena con motivo del cincuenta cumpleaños de la Infanta Elena, que nacía el 20 de diciembre de 1963. Este fue el motivo para que Iñaki Urgandarin regresara a la residencia de los Reyes de España, acompañado de su esposa, la Infanta Cristina. De esta manera no ha sido necesario esperar a Nochebuena ni a Navidad para que la Familia Real se reuniera.
Tras pasar unos días con su abuela la Reina Sofía y realizar un curso de vela en Mallorca, los hijos de las Infantas han seguido con sus vacaciones. Mientras los hijos de los duques de Palma se reunían con sus padres y ponían rumbo al País Vasco francés, Froilán y Victoria Federica se marchaban con su padre, Jaime de Marichalar a Sotogrande (Cádiz).
Como comentaba hace unos días Jaime Peñafiel en Sálvame, el suplemento de El Mundo LOC afirma que el traslado a Ginebra se trata del primer paso para el "cese de la convivencia" con Iñaki Urdangarin, una decisión en la que habrían tenido mucho peso el Rey y el príncipe de Asturias tras lo insostenible de la situación.
Mucho se ha hablado sobre el traslado a Ginebra de la Infanta Cristina con sus hijos y lo que está claro es que La Caixa le ha hecho un puesto a su medida para poner tierra de por medio tras la publicación de unos mails íntimos de su marido que dejan claro que ha tenido varias relaciones extramatrimoniales. La aparición de estos correos electrónicos podría haber hecho que la posición firme de la hija del Rey para mantener su matrimonio cediera ante la humillación pública al conocerse las infidelidades.
Al final, aunque ayer se hablaba de que la Infanta Cristina se iría a Ginebra con sus hijos y que Iñaki Urdangarin se quedaría en Barcelona, se ha sabido que se van a Suiza, pero se van todos juntos, incluido el duque imputado. A finales de este mes de agosto, la familia se mudará a su nueva residencia. La coartada oficial es que Cristina de Borbón, como directora del área internacional de la Fundació La Caixa, ha recibido el encargo de gestionar y coordinar los programas de esa entidad con diversas agencias de las Naciones Unidas y otras fundaciones con sede en Ginebra. Sin embargo, ya llevaban tiempo buscando una manera de huir de lo que se avecina judicialmente hablando y pensaron en Catar y en también en mandar a sus dos hijos mayores a un internado.
Según el suplemento de El Mundo, La Otra Crónica los duques de Palma podrían estar planeando pasar unas vacaciones en Mozambique. Tras estos días de relax, viajarían a Boston donde se especula que podrían estudiar sus hijos mayores el próximo curso escolar. Esto sucede después de que la semana pasada se publicaran unas imágenes de la pareja pasando unos días con unos amigos en Menorca.
Los duques de Palma acudieron juntos a un partido de balonmano que disputan sus hijos. Iñaki Urdangarin y la Infanta Cristina intentan de esta manera seguir haciendo una vida normal, a pesar de la imputación de ambos en el caso Nóos y los rumores de crisis en la pareja. Ante la presencia de la prensa, el matrimonio se mostró muy sonriente.
Parece que los duques de Palma hacen oídos sordos a todo lo que se dice sobre ellos y a lo que piensa la mayoría de la sociedad sobre sus acciones. La pareja salía anoche a cenar a un restaurante barcelonés con total naturalidad, se tomaban de las manos y sus escoltas impedían que los fotógrafos presentes hicieran su trabajo.
En El programa de Ana Rosa, la periodista Mariángel Alcázar revelaba que los Duques de Palma y sus hijos cenarán en Nochebuena con los Reyes, los Príncipes y la Infanta Elena en Zarzuela, donde compartirán también la velada con las hermanas del Rey. Algo que no ocurrió el pasado año cuando se quedaron en Washington, alejados de su familia.