Supervivientes: de la supervivencia al cotilleo

Supervivientes 2022 perdía el jueves a una de las pocas personas que había ido a sobrevivir. El cotilleo campa por sus respetos en una edición insoportable. El macarra de Anuar Beno se cagó en la put* madre de Mariana por robarle la comida.

Kiko Matamoros se cagó en el mar siendo esto lo más reseñable de los 15 días que lleva de vacaciones en Honduras. Juan Muñoz ha apostado, con acierto, por dedicarse al fuego y a no entrar al trapo de nadie. El que comparte su vida con Enrique del Pozo se deja en evidencia cada vez que habla.

Alejandro les está echando muchas ganas a las pruebas y con su novia son casi lo poco que se salva de la quema. Nos quedan Desi, que yace bajo los cocoteros sin hacer absolutamente nada, Anabel, ídem lo que ocurre es que sabe disimular mejor, y el espadachín que iba a comerse el mundo y que fracasa prueba tras prueba.

Y es que ni Marta, que era quien podría poner en el once, que diría mi abuela, a cualquiera está dando resultados. Ahora se ha sacado de la manga que Tania tuvo un tonteo con un actor para ver si este cotilleo le pone de nuevo en la picota.

Ver cómo se hunde un cayuco, cómo confirman que lo suyo es estar de vacaciones o hablar de sus gustos íntimos y comprobar que se llevan una pasta por hacer el indio no provoca ningún tipo de interés en el espectador.

Que Anabel nominase a Kiko y que este se sorprendiera fue una burda opereta que no se cree nadie. Allá Mediaset con el gasto que supone este programa, pero tras la novedad Antena 3 vuelve a pisarle los talones con su programación. Ya veremos si esta panda no provoca que todo termine antes de tiempo. Esperemos que Alejandro siga aportando algo de ganas por sobrevivir, pescar y hacer todo lo posible por justificar el sueldo. Del resto pues nada, que siga el pase de modelos y que se dediquen al dolce far niente. Esperamos tu opinión al respecto.

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