Remedios Torres se defiende ante el juez de la Operación Karlos

Ayer fue el día de Remedios Torres en la Audiencia Provincial de Cádiz. Tras la más que sonada ausencia de María José Campanario, que estaba en Madrid acudiendo a las clases que le permitirán ser dentista, su madre se enfrentó, como Gary Cooper, sola ante el peligro al juez y según sus declaraciones es totalmente inocente de los cargos que se le imputan.

Según informó ayer Sálvame la suegra de Jesulín de Ubrique declaró en el juicio que con su estado de salud no habría hecho falta que nadie la suplantara ya que le habrían dado la ansiada pensión sin el mayor problema.

De Carlos Carretero comentó que «Hablé con él una vez por teléfono, él vino un día para traerme unos papeles para que los firmara» pero en ningún momento eran las de un contrato laboral y, solo estaba interesada por la revisión de su minusvalía, «alguna vez le preguntaba a mi hija si sabía algo de lo mío y ella me decía que estaba en marcha».

La sorpresa vino cuando la señora Torres reconoció haber firmado varios documentos sin leerlos y reconoció que la firma de los que se le presentaron no era suya. «Me llamaron para que bajara a hacerme unas pruebas y que avisara cuando me las hicieran y así hice. Y no sé si me llaman a mí o a mi hija y mi hija me dice que tengo que bajar y así hice. Tengo que bajar porque me tiene que visitar un doctor. Entonces bajé y mi hija quería acompañarme y el señor Carretero le dijo que mejor que no porque ya sabes lo que pasa contigo que donde vas se hace mucho revuelo».

La pregunta del millón la hizo ayer Mila Ximénez. Imaginemos que le dan la pensión de 1.200 euros mensuales, ¿habría ido a la Seguridad Social a decir que habían falsificado su firma? Seguiremos informando.

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