Quince años sin Lola Flores

María Dolores Flores Ruiz, jerezana de la Calle Sol, vino al mundo el 21 de enero de 1923, cuando falleció, el 16 de mayo de 1995 lo hizo la persona, nunca el mito. Nadie le podía augurar cuando comenzara a cantar por los bares de Jerez de la Frontera que se convertiría en la primera artista viva en estar en una enciclopedia como mito de la música.

Del debut en el teatro Villamarta a trabajar con Manolo Caracol con quien estuvo hasta 1951. En el 58 se casó con Antonio González, El Pescailla, con quién tendría 3 hijos, Lolita, Antonio y Rosario. La artista, que en los sesenta actuó en el Madison Square Garden, fue una leyenda viviente y todo un personaje.

Con una amplia filmografía a sus espaldas fue también la televisión la que la encumbró como una de las mejores presentadoras de la historia. Sus apariciones siguen siengo legendarias, como aquella en el programa de Iñigo cuando perdió un pendiente, y sus programas televisivos siguen estando entre lo más selecto de la televisión de los noventa.

Polémica y clara como el agua tuvo sus más y sus menos con el ministerio de Solchaga y con los socialistas que quisieron hacer de ella la cabeza de turco en su juicio por haber defraudado a Hacienda. Posteriormente consiguió reponerse y ya enferma nunca permitió que la sonrisa se le borrara de su rostro.

Con una gala denominada Coraje de Vivir en la que participaron los mejores artistas patrios se puso el punto final televisivo a la historia de una leyenda de la música. Ya lo dijo el crítico neoyorquino tras verla en el Madison «No sabe ni cantar ni bailar pero no se la pierdan». Este artículo va por ti Lola, se te sigue echando de menos.

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