El príncipe Harry, otro ecologista que vuela en avión privado

El príncipe Harry es, como cierto presidente de cuyo país no quiero acordarme, otro ecologista hipócrita. Al igual que el político, el hijo de Lady Di lleva dando la brasa con el ecologismo durante años.

Que si la agenda 2030, que si las emisiones de CO2, que si la energía renovable, de todo un poco, como en botica, pero a la hora de la verdad se coge un avión privado para contaminar lo máximo posible.

Al igual que hiciera el que indicaba que suprimirá los vuelos de menos de dos horas, algo que se le olvidó cuando la persona que con la que está casada quiso ir a un festival de música costándole al contribuyente la fiesta unos 150 000 euros, Harry tuvo la jeta de decirle a Oprah Winfrey lo siguiente.

«Los niños están creciendo en un mundo deprimente. Dependiendo de donde vivan o el país está en llamas o inundado. Los bosques están siendo destruidos». Muy bien, pero yo me voy a jugar al polo en un avión que cuesta 60 millones de dólares.

Tom Quin, experto en los Royals, ha declarado que «es un hipócrita. Se cree que con hablar ya está diciéndole a la gente lo que tiene que hacer, pero que nadie le va a prestar atención a su comportamiento. Creo que demuestra una enorme torpeza».

Pues sí, pero ¿quién va a decir nada? Al igual que sucedió en el país del Quijote, habrá que seguir tragándose lo que quieran estos personajes. Nos gustaría que nos comentaras qué piensas tú a este respecto.

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