Pete Doherty detenido en Berlín

No hay día que no salte alguna noticia desagradable y rocambolesca sobre las patéticas hazañas del rockero británico, Pete Doherty. En esta ocasión y, como no podía ser de otro modo, ha sido su lamentable estado de embriaguez el que le ha llevado a acabar con sus huesos en la comisaría alemana, estando retenido en ella durante varias horas.

Y no se trataba de rendir cuentas por el lamentable espectáculo que ofreció a los alemanes cantando un himno nazi en pleno concierto, algo por lo que fue abucheado, si no porque, al parecer, sigue sin tener una medida justa en el consumo de bebidas alcohólicas, entre otras muchas sustancias.

Según cuenta el rotativo alemán ‘Bild’, Doherty acudió con sus amigos a un típico bar alemán llamado ‘Trinkteufel’ (El diablo bebedor) y que se vanagloria en el escaparate anunciándose como «la puerta del infierno», algo que el músico debió tomarse al pie de la letra. Según cuenta el encargado del bar, los tres llegaron después de haber sido expulsados de otro y a punto estuvieron de hacerlo en este también ya que, palabras textuales del camarero: «No hacía mas que beber copitas de aguardiente y preguntar por cocaína».

Pero el incidente ocurrió a la salida de la taberna cuando, en un patético estado de embriaguez, Pete, que llevaba una copa en la mano, tropezó al salir del local y rompió el cristal de un coche que estaba aparcado. La patrulla policial, alertada por los vecinos, acudió de inmediato que resolvió el asunto llevándose al músico a comisaría donde lo tuvieron retenido durante varias horas.

Vía | 20 Minutos

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