Omar Sánchez «El Negro» fracasa en Supervivientes

Anabel Pantoja nos vendió a su novio como si de un Tarzán del siglo XXI se tratase. Aparte de quejarse y tomar el sol, no ha hecho nada en Supervivientes. Todo el mundo esperaba que un joven dedicado al surf, en contacto continuo con el mar y con cierto bagaje en su isla natal fuera capaz de adaptarse a la situación, pero no ha sido así.

Desde el primer momento solo ha sabido alzar la voz, intentar imponer su voluntad sin tener razón alguna y convertirse en un personaje insulso al que el espectador apenas soporta. Además, acaba de saltarse una de las normas de Supervivientes y podría ser sancionado por la organización.

Como ya sabrás, a él y a Gianmarco les picó una araña. Ambos lloraban de dolor, lógicamente, mientras el médico les extraía el veneno. El italiano, que está sorprendiendo a muchos al demostrar que está luchando por seguir adelante en el concurso, acusa la picadura, pero parece restablecerse.

Omar, apuesta por la siguiente filosofía «camino y me duele. Me pongo a darle vueltas y me quiero ir a mi casa. Y como lo piense y me ponga a pensar que quiero volver a España cojo y me voy».

O lo que es lo mismo, aquí vamos a pasar más hambre que un caracol en un espejo y mejor irse a Canarias a trincar y que se queden estos aquí. Para conseguir su propósito, nada mejor que solicitar su nominación, algo prohibido, y esperar a que la organización le castigue. Esperamos tu opinión al respecto.

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