Naomi Campbell busca casa en Ibiza

Naomi Campbell busca casa en Ibiza

Escrito por: Sacra    2 junio 2009    2 minutos

Cuentan las buenas y malas lenguas que, desde que la hermosa Naomi Campbell encontró el amor, sus ataques de ira y su tempestuosa furia se han calmado de golpe. Como un flechazo de cuento o un romance al más estilo principesco, la ‘diosa de ébano’ ha encontrado su media naranja en el millonario ruso Vladislav Doronin. Con él se ha ido a recorrer el Mediterráneo en un lujoso barco, haciendo parada en los puertos más cotizados de la costa, incluso ya se habla de los preparativos de una fastuosa boda.

Y es en estos lugares, casi paradisíacos, donde a la pareja se le ha antojado comprarse una mansión donde descansar de sus múltiples actividades. Ya hace varias semanas que están visitando algunas, la última ha sido la que Borja Tyssen y Blanca Cuesta poseen en Ibiza. Todo lujo de paisajes nacidos en el Mediterráneo.

Y a punto estuvieron de quedarse con ella si no hubiera sido por los aviones militares que sobrevolaron la mansión mientras la visitaban. Al parecer el aeropuerto se encuentra lo suficientemente cerca como para que los aviones pasen, casi, rozando sus tejados, algo que sin duda no convenció a la pareja. Pero como siguen encaprichados de la isla y de fijar allí su residencia, aunque sólo sea en épocas de descanso, los enamorados siguen visitando casas que correspondan a su nivel y a su gusto.

Lo cierto es que la mansión de Borja era la ideal para ellos, las vistas son espectaculares y además cuenta con un sistema de seguridad extraordinario (debido a la obsesión del joven Tyssen por estos temas, cuenta con lo último en tecnología para la protección de su familia), además para ellos el dinero no es problema. Una oportunidad única para una venta inmobiliaria de las que no suceden tan a menudo, y más en los tiempos que corren.

Vía | ABC

2 comentarios

  1. Samantha dice:

    Qué barbaridad. ¿Pero esta gente notará la crisis?

  2. Sacra dice:

    Pues yo pienso que no mucho… o al menos no tanto como el resto de los mortales.
    Gracias Samantha por visitarnos un días más.