Michelle Obama pone a dieta a sus hijas, Malia y Sasha

La primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama está muy concienciada con la obesidad en su país, el mayor problema de salud de su población. Aunque en los últimos tiempos, los índices se han estabilizado, alrededor de un tercio de los estadounidenses sufre problemas de peso y los índices están en aumento en los niños.

Michelle es la imagen y la portavoz de la nueva campaña lanzada por el gobierno del país para luchar contra esta amenaza. La primera dama reconoció que sus hijas tenían sobrepeso y que cortó el problema de raíz con una dieta más saludable. En la Casa Blanca ha instalado un huerto y es una gran partidaria de las frutas y las verduras, algo que contó a los más pequeños en Barrio Sesamo.

Malia, de 11 años y Sasha, de 8, tenían un peso elevado para su estatura. «Con mis ojos pensé que estaban perfectas, no me dí cuenta de los cambios», afirmó en un evento organizado por las autoridades sanitarias de Estados Unidos. Sus hijas debían tomar menos carne, menos lácteos y cambiarlo por frutas, verduras y agua en lugar de bebidas azucaradas. Michelle afirma que el cambio fue significativo.

En el evento estuvo acompañada de Regina Benjamin, cuya elección como inspectora general de salud levantó una gran polémica porque una mujer con sobrepeso dirigiera el departamento de salud del país. Además, Barack Obama comentó hace un tiempo que Malia, se había puesto «un poco gordita». En Estados Unidos se gasta al año 150.000 millones de dólares en la lucha contra la obesidad, un gasto mayor incluso que el destinado a combatir el cáncer, por ello que el Presidente deje claro como se puede combatir y empiece por poner a dieta a su familia es un estupendo ejemplo, al igual que fomentar la dieta vegetariana en el colegio de sus hijas, algo muchos otros centros también han solicitado.

Vía | Informativos Telecinco

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