Michael Jackson, un amigo comenta su temor a ser tiroteado

Michael Jackson sufría muchísimo durante los meses anteriores a su muerte. Jason Pfeiffer, amigo del cantante, acaba de reconocer, según informa The Sun, el temor que tenía el rey del pop a ser tiroteado por cualquier persona debido a la permisividad existente en Estados Unidos sobre la compra de armas.

«Por eso quería volver a los escenarios en Inglaterra y no en Estados Unidos. Pensaba que cualquiera podría dispararle. Siempre tenía en mente que su país era muy peligroso». Pero aún hay más, Jason, que trabajaba para el dermatólogo de Michael, fue testigo de un momento estremecedor.

«Sabía perfectamente que iba a morir.La última vez que le vi se estaba despidiendo de todos nosotros, era como si supiera que no iba a volver más, solía decir que iba a ser disparado sobre el escenario pero esa vez fue diferente».

Jason no duda en comentar que la adicción del cantante a los medicamentos fue lo que terminó con su vida. «Michael escondía su deseo de morirse en enfermedades que se inventaba para que se le recetara el analgésico Demerol. Pedía que se le recetaran pastillas suficientes para tumbar a un elefante».

«He llegado a ver cómo pedía más analgésicos porque no podía soportar el dolor de un lunar». El otro galeno del mal, el dermatólogo Doctor Klein, no dudaba en inyectarle sedantes prácticamente cada vez que iba a verle.

«Se le inyectaba una dosis muy alta», prosigue Jason, «no era lógico y tenía que acompañarle o a un sofá para que descansara o a su coche pero le iba sosteniendo por dentro de su chaqueta porque no podía ni estar de pie». «Ignorábamos que también estuviera recibiendo medicación de otro médico al mismo tiempo. Sabíamos que algo iba mal». Sed vosotros los que comentéis estas declaraciones.

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