Kiko Matamoros, el último recurso de Telecinco para evitar la debacle en Sálvame
Kiko Matamoros es el último recurso de Telecinco para evitar que los espectadores de Sálvame, o lo que quedaba de los mismos, no mueran de aburrimiento. A Carlos Lozano fueron los colaboradores los que le enseñaron la puerta, hartos, quizá, de quedar en entredicho y de que un fuerte viento alterara la aparente calma en la que vivían.
Pero las tramas entre ellos se terminan y ya no hay más chicle que estirar. Ya el personal está hasta bastante cansado de las historias de la princesa, del creador de bombas que nunca estallan, de la bailonga de las mechas y hasta del que barre el plató.
El regreso de Matamoros es como un revulsivo para el espectador. Escuchar a alguien hablando en tertulianés, que diría Antonio Burgos, y volver a escuchar expresiones supuestamente cultas como «a día de hoy», «negro sobre blanco» y similares nos devolverá a la pantalla a un tipo con pinta de matón que intenta demostrar su cultura delante del resto de los niños de la guardería.
Al menos, tiene gracia, chulería y unos tics opuestos a la oferta diaria. De hecho, ayer mismo ya consiguió que Belén Esteban se fuera del plató por decir, en un vídeo, «la cartera del ministerio de Cultura no se la voy a dar a Belén». La otra entendió esto como «una provocación» y no como una dura verdad.
Sea como sea, su papel de defensor del espectador servirá para darle cera a sus otrora compañeros y para echar un rato divertido en el que los guionistas ya se encargarán de ir creando nuevas tramas para pasar el verano. Solo tú puedes opinar sobre este regreso. Abrimos los comentarios.
Vía | Telecinco
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