Kiko Matamoros y Carlota Corredera vuelven a coincidir en un plató

Matamoros y Corredera volvían a coincidir en un plató para intentar paliar los efectos del feminismo de 4 a 8. El encuentro fue bastante descafeinado. Todo comenzó cuando Kiko se atrevió a decirle a la Rottenmeier más redicha que no había visto el documental de Rocío Carrasco, algo que, como ya sabrás, es obligatorio según la ley de la cadena propiedad de un señor que hacía fiesta con menores.

Mintiendo como siempre, Corredera indicaba que «aquí nadie echa a nadie de ningún sitio» (ya se le ha olvidado cuando dijo que o se iba Montero o se iba ella) . Decía la presentadora, sin dejar hablar a nadie, que lo que había sucedido era que ambos habían pasado por un «periodo de reflexión o cese temporal de la convivencia».

En tertulianés, Antonio Burgos dixit, se comentaba que el contador «estaba a cero» para comenzar una nueva etapa. Y hasta aquí las mentiras. A ver si nos aclaramos, cuando Matamoros no va al programa la audiencia baja. Tras quitarse a Paz Padilla de encima, nadie ve a Corredera dando órdenes o poniendo caras de vergüenza ajena mientras le tocan las palmas.

Es decir, hace falta un contrapunto para que la audiencia reaccione de alguna manera. Matamoros entraba al trapo e incluso concedía una entrevista. Todo sea por salvar el barco. Lo malo es que del puerto ya han salido unos turcos que están a punto de darle la vuelta al mundo. Ya veremos si esta tropa tiene todo lo necesario para volver a conquistar a una audiencia en desbandada.

Curiosidades Televisión #carlota corredera #Kiko-Matamoros