Hugh Grant se autodefine como un monstruo

Raro es el famoso que no tiene sus manías, sus neuras o salidas de tono alguna vez en su vida y es que, aunque nos cueste creerlo, son sólo seres humanos tocados por la varita del éxito. La fama, ese extraño modo de vida, no es igual para todos, quizás por esto una mayoría de personajes acaben convirtiéndose en un cúmulo de rarezas imposibles de definir. Pero de ahí a que quieran reconocerlo puede haber un abismo.

El primero en destapar su caja de manías ha sido el actor Hugh Grant. Parece que el británico, en un arrebato de excelsa madurez, ha echado la vista atrás para hacer un balance sobre su vida y, a juzgar por las declaraciones que hace sobre sí mismo, no parece estar demasiado satisfecho.

Entre otras lindezas el actor asegura que el dinero lo ha vuelto «loco, malcriado y un auténtico monstruo». Definiciones que, si bien parece que se nombran con toda frivolidad, para el protagonista de ‘Nothing Hill’ supone un paso duro y preocupante. Hugh está convencido de que el hecho de que todos lo consideren una estrella le ha convertido en un monstruo.

No sabemos si en un arranque de sinceridad desmedida o en unas declaraciones calculadas que intenten relanzar su fama, casi olvidada, Hugh comenta: «Creo que me he vuelto un poco loco. Soy una persona muy consentida. En la habitación que tengo en la caravana, siempre insisto en que me laven el edredón. Además siempre exijo una funda de edredón nueva y también almohadas que tienen que haberse lavado al menos siete veces en detergente no biodegradable. ¿En qué clase de monstruo me he convertido?».

Si él lo dice… casi mejor no le llevamos la contraria.

Vía | Europa Press

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