Brad Pitt agotó sus horas en Donostia visitando el museo Chillida Leku
Como bien sabemos el actor Brad Pitt ha levantado más que expectación con su presencia en San Sebastián para presentar su película Malditos Bastardos junto a Tarantino.
Pero pese a que su visita era meramente oficial, conociendo el gusto del actor por la arquitectura y las obras contemporáneas, no ha sorprendido en absoluto que tras postergar dos veces su salida de Donostia dirección Niza, lo hiciera precisamente para visitar el museo Chillida Leku en Hernani.
Tras una cena en el prestigioso restaurante de Juan Mari ‘Azkar’ hasta las dos de la mañana con una veintena de personas, incluido Quentin Tarantino, poniendo nuevamente el restaurante en un estado de expectación sobre todo en el sector femenino. Pitt, tras agradecer personalmente la cena a Azkar, prometió que volvería con Angelina.
La sorpresa llegó cuando muy temprano por la mañana, el actor aseguró que conocía la obra de Eduardo Chillida por los libros y quería verla de cerca. Por lo tanto efectuó esta visita privada, desplazándose hacia la bahía donostiarra de La Concha, donde contempló el Peine de los Vientos una obra por la cual quedó fascinado siendo una de las obras más emblemáticas de Eduardo Chillida y por supuesto de la ciudad.
En el museo Chillida leku, le aguardaba toda la familia del artista, con Pilar Belzunce viuda del artista e Ignacio Chillida hijo del escultor y responsable del departamento de Obra y Artista del museo.
Brad Pitt protegido con un paraguas, paseó entre las esculturas, entró al caserío Zabalaga y fotografió las obras desde diferentes perspectivas. En el libro de visitas escribió un sencillo Many thanks y se fue encantado con los tres libros en inglés que le regalaron: uno sobre el museo, otro sobre la obra pública de Chillida y un tercero sobre los escritos del escultor.
Y entonces sí con dos horas de retraso, directamente desde Chillida-leku Pitt se fue al aeropuerto a coger su jet privado directo a Niza a presentar sus Malditos Bastardos.
Dejando la ciudad donostiarra con una resaca asolada por el huracán Pitt. Espero que vuelva pronto y una servidora pueda estar allí para contarlo de primera mano, ya que eso de que te pongan tus amigos y paisanos los dientes largos, como que no.
Vía | El diario Vasco
un comentario
Realmente merece la pena acercarse al museo Chillida Leku si tenéis ocasión. Además ahora sabiendo que a Brad Pitt le gusta la obra de Eduardo Chillida, igual hasta tenéis ocasión de verle por allí… cuando vuelva con Angelina.