Anabel Pantoja reaparece en Viernes Deluxe

Anabel Pantoja regresa a Sálvame, donde dijo que jamás lo haría, pero como invitada al Viernes Deluxe. Su venganza puede salirle rana. Entre otras cosas, por esa actitud de diva en la bañera con un cruasán y una botella de cava que parece darle una pincelada de Audrey Hepburn, pero en versión de barriada.

Tras indicar que ya se han acabado sus vacaciones de diputada, 90 días sin pegarle un palo al agua y 90 más en una isla tomando el sol, viene a por todas y a responder a todo el mundo. O lo que es lo mismo, a trincar, a no decir absolutamente nada y a atacar a los que no puedan defenderse.

Del espadachín se sabe bien poco en estos últimos días, de su padre menos todavía y de su marido pues sí, per no, precisamente, por su buena relación con él. Se espera que los colaboradores la masacren con sus preguntas y no se descarta que termine otra vez en Sálvame donde cobra una pasta gansa por ir a merendar, llorar y hacerse la ofendida.

Lo peor del caso es que en Telecinco creen que un viernes por la noche, con un veranillo de San Miguel estupendo y con cientos de opciones en televisión alguien se va a tragar semejante programa. Hay gente para todo, pero la deriva de Sálvame terminará en hundimiento en cuanto comience el programa de Sonsoles en Antena 3. Mientras tanto, a ver si podemos bebernos lo poco que queda de zumo en el limón. A ver quién abandona el barco mientras observamos cuáles son los límites a los que puede llegar el ser humano a cambio de un cheque.

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