Ágata Lys, otra de nuestras artistas que muere en el olvido
Ayer se supo que Ágata Lys falleció el 12 de noviembre sin ningún tipo de reconocimiento. Qué triste que nuestro país solo se acuerde de algunos. La que comenzó como musa del destape supo reconvertirse a actriz de mayor fuste participando en películas como Los santos inocentes de Mario Camus o Taxi de Carlos Saura. Incluso fue azafata del Un, dos, tres, pero vivir la vida a su manera tiene su precio.
Atrás quedaron sus actuaciones en Nochevieja, sus papeles dramáticos y el ir un paso por delante de otras actrices. La actriz tuvo todo lo necesario para ser una de las más importantes de este país. Lo malo es que la llegada de la modernidad, de las subvenciones y de los que querían enterrar todo lo que ellos no hicieron se convirtió en el punto final de su carrera.
Margarita García San Segundo tenía 67 años cuando falleció. Su última película fue Mala Uva en 2004. En teatro actuó por última vez en el año 2 000 en el auto sacramental El hospital de los locos. En televisión actuó entre 2005 y 2006 en Amar en tiempos revueltos.
Tras 15 años de silencio, se confirma que en España se prefiere la cultura de usar y tirar. Es posible, ojalá, que ahora comiencen los homenajes y la puesta en valor, que diría el cursi, de la carrera de una intérprete única. Sea como sea, destacamos la indudable calidad interpretativa de una actriz que eligió el camino más complicado para forjar su carrera. Descanse en paz la gran Ágata Lys.
Comentarios cerrados